El PT traiciona a la 4T: multado por $13 millones por evasión fiscal

En un hecho que pone en entredicho la congruencia de los partidos aliados a la Cuarta Transformación, el Instituto Nacional Electoral (INE) sancionó al Partido del Trabajo (PT) con una multa de 13 millones 369 mil 778 pesos, la más alta entre siete partidos políticos castigados por incumplimientos fiscales ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y que en total suman 32 millones.

La sanción no solo refleja una falta administrativa. Contradice de forma directa los principios rectores de la 4T: no mentir, no robar y no traicionar al pueblo. En términos estrictamente políticos, lo cometido por el PT equivale a una forma de evasión fiscal, práctica que el mismo movimiento de transformación ha señalado —con razón— como uno de los peores males heredados del viejo régimen.

Auditoría revela irregularidades sistemáticas

Durante una auditoría especial que revisó el rubro de impuestos por pagar, el INE detectó pagos no registrados, saldos no enterados y omisiones en las obligaciones fiscales correspondientes al ejercicio 2022 y años anteriores. La revisión abarcó a 315 partidos —nacionales y locales—, pero entre los sancionados, el PT fue el peor calificado.

Le siguieron el PRI, con 12 millones de pesos en sanciones; el PAN, con 4 millones; y el PVEM, con poco más de 283 mil pesos. Morena, por su parte, recibió la multa más baja de todas, con apenas 2 mil 74 pesos, lo cual contrasta aún más con el caso del PT, su aliado.

Un golpe a la legitimidad de la transformación

Más allá de los números, el escándalo toca fibras delicadas dentro del movimiento de la 4T. ¿Cómo justificar que un partido integrante de la 4T incurra en prácticas que tanto denunció el expresidente Andrés Manuel López Obrador así como la presidenta Claudia Sheinbaum?

El discurso de transformación exige una moral pública estricta y una transparencia radical. Sin embargo, el PT ha actuado como cualquier partido del pasado: omitiendo, maquillando cifras y dejando de cumplir con el fisco. En los hechos, el PT traiciona la confianza del pueblo y debilita al proyecto del que forma parte.

INE exige rendición de cuentas

Durante la sesión extraordinaria del Consejo General, Carla Humphrey, presidenta de la Comisión de Fiscalización, subrayó que la auditoría fue un procedimiento excepcional pero necesario, dadas las múltiples inconsistencias encontradas. Se emitieron 296 requerimientos, 130 reuniones de confronta y 558 solicitudes de corrección contable. De estas últimas, 71 fueron rechazadas por no justificar adecuadamente los errores fiscales.

“El INE mantiene una política firme de exigencia en transparencia financiera”, afirmó Humphrey. Pero el mensaje parece no haber calado en todas las fuerzas políticas por igual.

¿Y ahora qué?

La sanción económica es, sin duda, un primer paso. Pero la verdadera transformación exige congruencia. Si el PT quiere seguir siendo parte de un proyecto que se dice diferente, debe actuar diferente. De lo contrario, se convierte en cómplice del mismo sistema que prometió combatir.

En una era donde la rendición de cuentas ya no es optativa, el PT tiene una deuda no solo con el SAT, sino con el pueblo mexicano. Y esa deuda —ética y política— no se salda con dinero, sino con honestidad.